El fin de semana pasado, casi plantando todavía el pie de nuevo en Helsinki, me topé con una de las fiestas más celebradas por aquí: Vappu. Es la fiesta que marca el fin del invierno o, lo que es lo mismo pero con una pincelada mayor de optimismo, la llegada de la primavera. Es obvio que esta gente, aunque no descontentos del todo con el hermoso invierno del que hemos sido testigos este año, ansían como las hormigas la llegada de la primavera y del buen tiempo. Y parece mentira que yo esté llamando buen tiempo a que haga 10 grados y que, cuando le pilla bueno, el sol ilumina el cielo como si no fuese a salir más. Pero lo cierto es que sí, sólo esto ya se agradece. Y eso que sólo hemos pasado aquí un invierno y ha sido bellísimo. Es fascinante ver cómo crece verde en los parque por día. Parece ayer cuando los setos estaban cubiertos de nieve y ahora se le empiezan a ver los brotes a esas ramillas marrones que parecían muertas entonces. Ayer, sentados en la terraza de un bar, a orillas del mar, hablábamos de cuando éste se veía totalmente congelado y andábamos por ahí encima junto a Clemente y a Conchi. Y, sí, han leído bien, en la terraza de un bar, con sus típicas mantitas colocadas sobre las sillas al azar para echártelas por lo alto cuando hace rasquita, vamos, casi siempre. Pero no deja de ser una gozada. Es muy usual ver mantas con ese fin en todos los lugares con terrazas y también en bares de copas y restaurantes para aquéllos que salen a fumarse un cigarrito.
A lo que iba.
Los días empiezan a hacerse interminables. Ayer al sol, que sale poco (pero más de lo que podíamos llegar a pensar), le costaba esconderse a eso de las nueve, allá por el horizonte. Y su fuerza aguanta al día, al menos, durante una hora más. Y esto, también por día, va en aumento.
Es todo: la gente, sus sonrisas, el ambiente, los parques, sus verdes y sus pájaros, el cielo azul intenso y a veces también la lluvia, por qué no... todo en plena ebullición. Y esto no ha hecho más que empezar.
Y he pensado que, para no haceros perder el encanto de esta asombrosa metamorfosis estacional que bien merece una entrada para ella sola, en otro momento os cuento cómo lo celebran estos personajes que, cualquier otro día, se hacen llamar personas.
Y también os contaré otro día que lo que estuve bebiendo ayer al fresquito no es bitter kas (bebida que detesto y aunque la probé en su momento ninguno me vísteis), sino Karpalo Lonkero, bebida compuesta de arándanos y un pelín de ginebra, con una graduación alcohólica similar a la de la cerveza y que aquí hace las veces, para mí la mar de bien, de tintito de verano, algo que ni se me pasa por la cabeza intentar pedir pero que, aparte de tener también su página en facebook, también aparece en la wikipedia. Por supuesto, "me gustan" las dos y, por supuesto, no os hablaré de esto otro día porque ya lo he hecho hoy.
Hasta otra.
Pues es verdad que parece una terraza en cualquier sitio de la Carihuela ó Pedregalejo, aunque da frío solo de ver las mantas sobre las sillas. Pensé que eran toallas de baño pa cuando sales del bañito en el mar jejeje, ¡qué ilusa! ¿eh? :-)
ResponderEliminarUn montón de besos a repartir entre los dos.Muak
Que alegria ver ese cielo y esa claridad.La verdad es que,como hace tanto frio, se agradece el solecito cuando sale, aunque no queme como el nuestro.
ResponderEliminarDon Alvaro, a la cola, ves como no se puede hablar tan alegremente.
Besitos
PD.MARTA YA ESTA PUESTO ICP, Y COMUNICADO PARA QUE VENGAN.
Uyyyyyyyyyyyyyyy, un poco más y se me cuela otro.......
ResponderEliminarAmores, disfrutad de los 10 graditos, que es estupendo y sobre todo gradual. Aquí ahora lo mismo te fríes que al día siguiente te tienes que poner una rebequita, vamos, perfecto para coger un resfriado de narices y tirarte tres días como un trapo. Ya quisiera yo ahora mismo una primaverita suave por estas tierras. Si al final tiramos todos pa Helsinki, verás...
Un beso fuerte, petarda
jajaja, soy lo peor, la próxima, la próxima será mía. Marta por favor, haciendo uso de esa amistad que nos une, avísame antes de publicar la entrada,jjajaja.
ResponderEliminarBueno, no quiero yo poner el puntito excéptico, pero vamos, va a ser que ahora Finlandia es un paraíso de luz y calor,jajaja
Besos. Hablamos pronto