Hace tres semanas, coincidiendo con la visita de Antonio y Susana, fue la feria de Alcalá de Guadaíra, mi pueblo. Desde que soy capaz de recordar, ésta es la segunda vez que me ponen falta de asistencia allí. La primera fue estando en séptimo de EGB, que me pilló una neumonía que me tuvo cerca de un mes encamada y tapada con el edredón hasta el cuello. Sí, en junio, mientras todos alternaban la feria con remojones en la piscina en mi casa. Recuerdo como primo Alberto pasó muchas horas conmigo cuando le dieron las vacaciones, entreteniéndome y haciéndome reir. No me queda un mal recuerdo de aquéllo, salvo la inyección diaria en las nalgas...
A lo que iba. Es la segunda vez que falto. Siempre por causa mayor. Y he esperado a no tener morriña para poder publicar esta entrada en condiciones, sin ser muy pastelosa, que me conozco.
Y aquí nos vimos cuatro alcalareños, una de adopción pero casi que no se le nota, con una botella de manzanilla, sevillanas y una teoría sobre los (no) farolillos en Helsinki.
Hablando de farolillos, hace poco leí que fue en 1877 cuando se utilizaron por primera vez en la Feria de Sevilla los llamados farolillos venecianos, que son los que se siguen utilizando hoy día, y que tienen su origen en el conocido carvanal italiano. Últimamente, ya ven, va la cosa de carnavales.
Y, hablando de farolillos, he aquí la teoría:
La canción, preciosa, es del grupo porterodelantero
Dejo vía libre para que Dani resuma todo aquéllo que nos contó durane la grabación del vídeo. Estad atentos a los comentarios, ¡su teoría es, si cabe, más interesante que la de los farolillos!
Y para terminar, agradecer a todos aquéllos que os acordásteis de nosotros en feria y brindastéis a nuestra salud. Y a los que no, ¡qué caraio, la feria está para olvidarse de todo! :)
Y ahí van las pruebas de que Clemente es un hombre de palabra: ¡gracias!
Esta entrada se la dedico a alguien muy especial. Igual este año tendría que haber estado en Alcalá en feria. Y no precisamente para bailar sevillanas. O si, quién sabe. Ánimo, pequeña. Te quiero.
Y a tí, Dani, nueve años. Y diez. Y cien.
asias
ResponderEliminarg
Ya te contaré en un privado por que estuve sin internet, y por que no vi tu blog en tanto tiempo. Al menos esta vez gané a Mr Clemente.
ResponderEliminarja!!!
Me gusta más este diseño, nena.
Abrazossss guapa, jjjajaja y me reí con el video.
y por cieto, si señó, la canción muy chula!!!
ResponderEliminarhum... se parece un poco a Los lentejas, ¿no?... pero me parece mu malamente no escuchar las explicaciones de Dani sobre, presumo, las implicaciones antropológicas del sol de medianoche... ¡no nos hurtes ar Dani, queremos ar Dani!
ResponderEliminarg: ¿gracias por qué? ;)
ResponderEliminarÁlvaro: ya te respondí en un privado a tu privado, jajaja. El señor Clemente también me mandó un privado diciéndome que está en Matalascañas y que le era imposible acceder a mi página, no sabía muy bien por qué... Vamos, que te has librado por los pelos!!
La canción es P R E C I O S A
Javi, creemé, prefieres no escuchar las explicaciones en el vídeo... ¡Pero no desesperes!, en breve aparecerá por aquí contándolo todo con pelos y señales (de hecho, ya está tardando, ejem)
jajajaja, todavia me estoy riendo con el video, y me acuerdo y me rio, jajajaja. muak, q poquito nos queda pa veros...
ResponderEliminarPues si que nos falta que Dani nos explique su teoria que promete ser muuuuy interesante.
ResponderEliminarEl video chulísimo, estan guapos los tios eh? pero..... las chicas se escondieron en la noche clara.
Lo curioso del final del video es Dani atinando con la cerradura y despues dar en las narices de la cámara, parece real real.
Besitos
Por fin pude entrar.
ResponderEliminarDon Alvaro, no se venga Vd. arriba.
Qué bonito, a mí me ha gustado. Y la censura, en este caso, ha sido necesaria, aunque a ver quién tiene ese porte después de la cena con menú de vinos del Demo y los Jackys del Tavastia.
ResponderEliminarExplico la teoría heliocinética que estaba exponiendo en esos momentos. De chico, yo estaba acostumbrado a ver salir el sol por el este, tenerlo arriba a mediodía y ver cómo se perdía por el oeste. A mediodía el sol siempre estaba inclinado al sur, por eso las viviendas se suelen orientar al sur y las que quedan al norte están más sombrías.
Aquí, en invierno, el sol salía por el este, apenas remontaba el vuelo y se perdía por el oeste. Fin de la historia hasta el día siguiente. A mediodía no lo teníamos encima; para verlo tenías que mirar al sur.
En verano la cosa cambia. El sol sigue saliendo por el este, pero sí se ve en el mediodía arriba de las cabezas. Pero el cambio fundamental es en "la noche": el camino de vuelta del oeste al este lo hace el sol por encima de la línea del horizonte. Lo que estamos señalando en el vídeo es el sol que, a las 4 de la mañana está en el noroeste, viajando hacia el este para volver a salir por la mañana.
Imagina que estás en Matalascañas, ves cómo desciende el sol yendo hacia Mazagón pero luego se mete tierra adentro, siempre visible, y vuela sobre el coto de Doñana hasta llegar a Sanlúcar y volver a salir. Pues eso aquí todos los días.
Ahora si, yo es que con tanto este, oeste, sur, me hago un lio, pero cuando lo has explicado ( como si fuera para mí ), poniendo el ejemplo de Matalascañas, Mazagón etc. si lo he entendido.
ResponderEliminarGracias Dani.
Besitos